CAPÍTULO IV
LA CRISIS DE UCRANIA
A finales de septiembre del 2020, el nuevo Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, aprobó una Política de Seguridad Nacional que tenía como objetivo establecer una alianza de intereses con la OTAN con el fin último de incorporar a Ucrania como Miembro Pleno de la Organización, lo cual estaba previsto a ser considerado en la siguiente Cumbre de lideres de la OTAN que se celebraría en Madrid a mediados del año 2022. Esta acción del muevo Presidente ucraniano prendió las alarmas en el Kremlin y dio comienzo a la cuenta regresiva para lo que hoy dejó de ser una “Operación Militar Especial”, para convertirse en una guerra de facto. (21)
Los meses de marzo y abril de 2021 vieron el mayor despliegue de tropas, blindados, artillería y misiles por parte de la Federación de Rusia hacia las fronteras con Ucrania desde la anexión de Crimea en marzo de 2014, contabilizándose más de 100.000 efectivos apostados en los limites sur y este de Rusia con Ucrania. El contingente de tropas rusas sería parcialmente desmovilizado en junio de 2021.
Pero tras la ignominiosa retirada de las fuerzas de la OTAN de Afganistan entre julio y agosto de 2021, Putin vio una oportunidad para avanzar en su expansionismo neoimperial con su cantado propósito de restablecer el Russkiy Mir o Mundo Ruso de la época zarista, forjando “…una nueva nación y gentilicio, surgido de la unión de rusos, bielorrusos y ucranianos, sin importar el costo humano que ello conlleve”.(22) En septiembre de 2021, apenas transcurridos 30 días de la retirada de Afganistan, la que el expresidente español José Maria Aznar calificó como" un error que vamos a pagar muy caro y durante mucho tiempo" (23), Vladimir Putin dio la orden de desplegar nuevamente tropas, artillería y carros de combate en las fronteras de Ucrania, totalizando ese nuevo despliegue cerca de 125,000 efectivos.
El año 2022 fue recibido por un Vladimir Putin confiado y desafiante ante la evidente división en la OTAN producto del desastre en Afganistan. El 10 enero de 2022, en una reunión entre diplomáticos rusos y norteamericanos celebrada en Ginebra, Suiza, los representantes de Putin presentaron dos propuestas de “Tratados de Seguridad” a sus pares norteamericanos que incluían una garantía vinculante que Ucrania no se incorporaría a la OTAN y la exigencia de una reducción cualitativa y cuantitativa de efectivos de la OTAN estacionados en los países de la Europa del Este. Esas propuestas fueron acompañadas de una amenaza de respuesta militar “no especificada” en caso de que no fuesen aceptadas por la OTAN.
En aquella ocasión Vladimir Putin puso sobre la mesa por vez primera el uso de armas no convencionales en caso
de estallar una guerra con Ucrania. Así lo manifestaría Sergei Ryabkov, Viceministro del Exterior ruso, quien durante esa reunión asimiló los acontecimientos en torno a Ucrania con los que hace 62 años llevaron al mundo al borde de la Tercera Guerra Mundial durante la Crisis de los Misiles de Cuba, en octubre de 1962. Aunque Estados Unidos y la OTAN rechazaron las demandas de Putin, no lograron detener los acontecimientos en marcha.
A Putin no le preocupaban las amenazas de sanciones económicas y financieras pues contaba con que países claves de la Alianza Atlántica como Alemania que dependían energéticamente de Rusia y Hungría cuyo presidente Victor Orbán era un declarado aliado de Putin, impidieran las sanciones o diluyeran su efectividad. Pero lo que sí preocupaba al Presidente ruso era la posibilidad que la OTAN desplegara tropas en Ucrania para enfrentar la invasión rusa.
Esa posibilidad quedó descartada a los ojos de Putin por la declaración emitida por el Secretario de la OTAN Jens Stoltenberg quien dijo que si bien Ucrania era un socio de la OTAN que merecía apoyo “…debemos reconocer que Ucrania no es un aliado de la OTAN. No tenemos planes de enviar tropas de la OTAN a Ucrania”. Sin duda, esta inoportuna declaración del Secretario Stoltenberg debió causar estupor en Kiev y constituyó para Putin el visto bueno para su ataque a Ucrania.
En el 10 y 20 de febrero de 2022 se realizaron ejercicios militares conjuntos entre Rusia y Bielorrusia denominados “Determinación Aliada 2022” que tendrían su inicio en la frontera oeste de Bielorrusia con Polonia y las Repúblicas Bálticas (naciones miembros de la OTAN), culminando en la frontera sur con Ucrania el 20 de febrero. El Vice Ministro de Defensa de Rusia Alexander Fomin informó que Rusia enviaría a Bielorrusia un número no revelado de tropas, además del siguiente equipo pesado: 12 cazas SU-35; dos divisiones de misiles antiaéreos S-400, una división de “Sistemas Pantsir-C” que combinan cañones y misiles antiaéreos y baterías de misiles crucero tácticos “Iskander” con capacidad nuclear y un alcance de 200 kilómetros.
Según un despacho de la Agencia Reuters fechado el 4 de febrero de 2022, el Secretario General de la OTAN Jens Stoltenberg, informó que Rusia tenía desplegados en Bielorrusia 30,000 efectivos con su armamento de combate, incluyendo fuerzas especiales o Spetsnaz. Stoltenberg tambien adelantó que por orden del Presidente Biden, el Pentágono enviaría 3.000 tropas norteamericanas adicionales para su acantonamiento en Polonia y Rumania. Con el despliegue del material de guerra y tropas rusas y bielorrusas en la frontera con Ucrania (a solo 130 kms. de Kiev), se completaría el cerco estratégico a Ucrania por el norte (Bielorrusia), el sur (Crimea) y el este (Rusia).
El siguiente paso de Vladimir Putin lo llevó a asegurar el vital apoyo de la República Popular China - el principal socio comercial de la Union Europea - a su aventura en Ucrania, para lo cual se trasladó a Beijín con el objeto de reunirse con Xi Jinping el 4 de febrero, horas antes que comenzara la Sesión Inaugural de los Juegos Olímpicos de Invierno. En la reunión en Beijín, Putin le habría confirmado al Presidente Xi que el ataque a Ucrania se produciría despues de concluidos los Juegos de Invierno el domingo 20 de febrero, para no afectar los intereses de China.
En Beijín, Putin lograría una declaración conjunta con China que le serviría de apoyo para la agresión que estaba
por desatar. Los representantes de China y Rusia emitieron un pronunciamiento dirigido a la OTAN con el propósito disuadir a la Organización del Atlántico Norte de intervenir en el conflicto que se avecinaba. La Declaración de Beijín tambien incluyó el reconocimiento por Rusia del principio de “Una Sola China” que tiene a Taiwán como parte integral de la República Popular China. A su regreso a Moscú, Vladimir Putin, durante una rueda de prensa celebrada el 8 de febrero, nuevamente amenazó a la OTAN con una guerra nuclear si Ucrania ingresaba a la Organización o intentaba recuperar Crimea. A partir de ese momento, los acontecimientos se desarrollaron de forma acelerada.
El 17 de febrero, los Presidentes Putin y Lukashenko de Bielorrusia anunciaron la extensión sine die de los ejercicios militares conjuntos “Determinación Aliada 2022”, lo que implicó que más de 30.000 soldados rusos equipados para el combate permanecerían desplegados a lo largo de la frontera con Ucrania. El sábado 19 de febrero, Putin nuevamente asomó la opción nuclear al efectuarse en Rusia ejercicios nucleares en el polígono de Ussuriysk, los que incluyeron el lanzamiento de misiles estratégicos hipersónicos de última generación. El 21 de febrero, como antesala a la invasión a Ucrania ejecutada 72 horas despues, se abordaron los requisitos formales y constitucionales relacionados con la acción militar en puertas con el propósito de darle “visos de legalidad”. Ese mismo día Moscú reconoció oficialmente a las provincias separatistas de Donetsk y Lugansk en el Dombás ucraniano como “estados independientes” y desplegó tropas en apoyo a los “nuevos estados”. El 22 de febrero, Putin desconocería los Acuerdos de Minsk (24 ) y recibiría la autorización del Consejo de la Federación de Rusia para el uso de fuerza militar en el exterior.
CAPITULO V
LA GUERRA EN UCRANIA
“Kiev podría ser tomada despues de 72 horas del comienzo de una invasión”
- General Mark Milley, Jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos -
Con las primeras luces del 24 de febrero de 2022, comenzó la que Putin calificó como una “Operación Militar Especial” que llevaría a las fuerzas rusas a invadir Ucrania por tierra, mar y aire, desde el sur, el norte y el este, constituyendo el mayor ataque de un país europeo contra otro desde 1945. El ataque ruso fue planificado bajo el concepto de blitzkriege o guerra relámpago y estaba previsto culminar exitosamente en cuestión de días con la toma de Kiev, la eliminación física de la dirigencia ucraniana y la rendición de sus fuerzas militares. Ese día un imbuido Vladimir Putin amenazó por tercera vez a los Estados Unidos y a la OTAN con el uso de armas no convencionales de alta letalidad, manifestando en tono por demás agresivo: “Quien trate de interferir contra nosotros y quien amenace a nuestro país, debe saber que nuestra respuesta será inmediata y traerá consecuencia hasta hoy desconocidas para ustedes.” Durante el primer mes de combate fuerzas rusas atacaron Kiev y las ciudades más importantes del sur y el este de Ucrania, incluyendo la Central Nuclear de Zaporizhia, la mas grande de Europa.
Pero a mediados del mes de abril de 2022, ya resultaba obvio que los planes de Putin de conquistar Ucrania en cuestión de días habían fracasado pues Kiev no había sido ocupada, el gobierno del Presidente Zelenskyy continuaba operando (25) y las fuerzas ucranianas estaban forzando a los invasores rusos a retroceder en todos los frentes de guerra causándoles un alto costo en pérdidas humanas y de equipos.(26)
Y para mayor desafío hacia Vladimir Putin, las fuerzas de Ucrania llevarían la guerra a Rusia pues el 1º de abril de 2022, se produjo el primer ataque por tropas enemigas a territorio ruso desde que el Ejercito aleman invadió la Union Sovietica el 22 de junio de 1941, en ejecución de la “Operación Barbarosa”. Ese 1º de abril, dos helicópteros Mi-24 del ejercito ucraniano atacaron con misiles un depósito de combustible de la empresa energética rusa Rosneft, ubicado a 80 km de la frontera con Ucrania. La instalación fue destruida. Los ataque por aire y tierra a territorio ruso por fuerza ucranianas continúan hoy, aumentando en intensidad y efectividad y teniendo como objetivos a blancos que se encuentran a cientos de kilómetros de la frontera ruso-ucraniana. El último ataque aéreo ucraniano a territorio ruso se produjo el 4 de abril de 2024 contra la base aérea de Morozovsk, en la Región del Rostov, en el suroeste de Rusia. La Base Morozovsk, ubicada a 350 kilómetros de la frontera con Ucrania, es la sede del Regimiento Aéreo 59th de Bombarderos de la Fuerza Aérea rusa que es usada por bombarderos SU-24, SU-24M y SU-34 para atacar Ucrania. En el ataque resultaron destruidos 6 bombarderos, 8 fueron dañados y 20 soldados rusos perdieron la vida.Ucrania introdujo un nuevo dron kamikaze de largo alcance, denominado E-300 “Enterprise” con capacidad de volar 3100 kilómetros, cargando una ojiva de 300 kg.
Ante la imposibilidad de lograr la rendición de Ucrania, la actual estrategia de Rusia se centra en ataques aéreos con drones y misiles a centros urbanos, industriales y energéticos, causando grandes daños a la infraestructura en Ucrania y pérdidas humanas. Ante los desmanes cometidos por Rusia contra la población civil ucraniana, incluyendo el secuestro y traslado a Rusia de niños y menores, lo que está tipificado como crimen de guerra según el Estatuto de Roma, el 17 de marzo de 2023 la Corte Penal Internacional CPI emitió una orden de arresto contra Vladimir Putin. Aunque Putin había dejado entrever que no pensaba aspirar a un nuevo mandato presidencial como se lo permitía la enmienda constitucional por él propuesta, no es descartable que la orden de detención emitida por la CPI por crímenes de guerra lo impulsó a anunciar el 6 de diciembre de 2023, durante una ceremonia celebrada en el Kremlin con soldados que habían combatido en Ucrania, que aspiraría a un quinto mandato presidencial para el periodo 2024-2030. La orden arresto de la Corte Penal Internacional es la primera emitida contra un jefe de estado en funciones, lo que implica para Vladimir Putin una limitación a sus traslados al exterior, pues se arriesga a ser detenido si viaja a uno de los 123 países miembros de la CPI porque los Estados firmantes de su Tratado están obligados a cooperar con el arresto de los sospechosos, aún si son jefes de estado en funciones. Pero las malas noticia con cesarían para Putin pues el 4 de abril de 2023 Finlandia ingresaría como el miembro 31 a la OTAN, país que procedió a cerrar su frontera con Rusia.
La guerra en Ucrania ha impuesto un altísimo costo sobre Rusia. Contrario a la permisiva falta de respuestas por parte de Occidente con relación a las agresiones rusas contra la República de Georgia en el 2008 y Ucrania en el 2014, esta vez las sanciones económicas, comerciales y financias impuestas por Occidente han impactado muy negativamente a Rusia. Entre las principales sanciones figuran el congelamiento de activos en el exterior (27) de empresas y personas de la Federación de Rusia y del Banco Central ruso, totalizando 320.000 millones de Euros; la suspensión por Europa de las compras de gas y petróleo ruso, poniendo fin a la dependencia energética con la que contaba Putin como medio de presión para disuadir a la Union Europea de brindar ayuda a Ucrania y limitaciones comerciales impuestas a un centenar de empresas que no solo afectan a entidades rusas, sino también a corporaciones de China, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, India y Serbia que ayudaron a Moscú a burlar las sanciones primariamente impuestas en febrero de 2022.
El presidente Joe Biden anunció en febrero de 2024 un nuevo paquete de más de 600 sanciones contra Rusia en
respuesta a la muerte el 16 de febrero de 2024 en una colonia penal en el Ártico del líder opositor Alekséi Nalvany. Las nuevas sanciones afectan a empresas y organismos financieros, a decenas de funcionarios rusos, incluyendo a miembros del poder judicial, a políticos locales y nacionales, a oligarcas y, por supuesto, al propio Vladimir Putin. Pero el apoyo a Ucrania no se ha limitado a sancionar económica y financieramente al régimen ruso, pues todos los países Europeos y Estados Unidos han apoyado a Ucrania con el envió de municiones, misiles, tanques y baterías antiaéreas. Pero lo que más ha preocupado a Putin es que Washington autorizó a Holanda, Dinamarca y Noruega a transferir 65 caza bombarderos F-16 a Ucrania, lo que le permitiría a Ucrania enfrentar a los Migs y Sukois rusos en igualdad de condiciones. Ante este negativo giro en su guerra, Vladimir Putin amenazó a con atacar las instalaciones aéreas de la OTAN que sirvan de base a los F-16 que entren en combate sobre el cielo de Ucrania. (28)
Rusia ha asumido pérdidas humanas y materiales solo comparables con las sufridas durante la Segunda Guerra Mundial. El altísimo costo en bajas militares que ha obligado a Vladimir Putin a extender la edad tope para el reclutamiento militar a 30 años, ha sido estimado por los servicios de inteligencia norteamericanos en más de 80.000 fallecidos en combate y 300.000 heridos. Con respecto a las pérdidas de material estas se estiman en 15.000 que incluyen: 5149 tanques destruidos o abandonados y 537 capturados; 340 aeronaves destruidas; 12.120 vehículos y 26 unidades navales hundidas o dañadas, contándose entre estas un submarino y el buque insignia, el crucero misilístico Moskvá. (29)
Las bajas sufridas por las fuerzas rusa en Ucrania han obligado a Putin a recurrir a reclutamiento forzado de civiles lo que llevó a manifestaciones en toda Rusia - principalmente en San Petersburgo y Moscú - y al arresto de cientos de personas. Jóvenes en edad militar han optado por huir de Rusia para así evitar ser enviados al frente de guerra. Entre los miles de rusos que ha abandonado su pais resalta el caso de 2 jovenes que el 5 de octubre de 2022 cruzaron el Estrecho de Behring en un pequeño bote que llegó a la costa rural de Alaska, donde pidieron asilo a las autoridades norteamericanas.(30)
Esa migración ha llevado al alistamiento de personas enfermas o que exceden de las edades para la conscrición. Tambien se ha recurrido al alistamiento de presidiarios a quienes se les ofrece la conmutación de sus condenas a cambio de servir en el frente de guerra. Pero las protestas contra lo que hoy es una guerra abierta en Ucrania no se han limitado a las madres o parejas de jovenes rusos que han muerto o quedado lisiados producto de los combates en Ucrania, pues miembros de la secta de “oligarcas” cercanos a Putin tambien han manifestado su rechazo a la guerra en Ucrania desde su mismo comienzo.
Esa oposición surgió por los daños que han afectado a sus empresas producto de las sanciones impuestas a Rusia por Estados Unidos, la Union Europea, y Japón, que afectan especialmente a las grandes gasíferas GASPROM Y NOVATEK, lo que llevó a Putin a ir más allá del arresto y encarcelamiento de los oligarcas contestatarios. La desaparicion sistematica de “oligarcas” por oponerse a la guerra en Ucrania ha sido descrita por la prensa internacional como “suicidos montados”.(31)
Entre los supuestos “suicidios” cometidos a partir del inincio mismo de la “Operación Militar Especial” en Ucrania, atribuidos a ahorcamientos, disparos en la cabeza o cortes de venas, se cuentan los siguientes altos ejecutivos del cartel empresarial estatal GASPROM: Leonid Shulman, Alexander Tyulyakov, Vladislav Avayev y Mikhail Tolstosheya. Por su parte, Sergei Protosenya, el Presidente Ejecutivo NOVATEK, la mayor productora independiente de gas natural en Rusia despues de GASPROM, fue encontrado muerto en su villa familiar en Lloret del Mar en Cataluña, España, por ahorcamiento, junto a su esposa e hija que fueron apuñaladas. La policía catalana decidió mantener abierta la investigación pues se considera que los hechos que rodean el caso no son del todo claros.
Fin tercera parte.
Continuara....
Articulos relacionados:
¿QUIEN ES VLADIMIR VLADIMIROVICH PUTIN? (primera parte)
¿QUIEN ES VLADIMIR VLADIMIROVICH PUTIN? (segunda parte)
Referencias:
(21) Dmitri Peskov, portavoz de Vladímir Putin, 22 de marzo 2024
(22) Articulo de Vladimir Putin sobre Ucrania publicado en el sitio web del Kremlin el 12 de julio de 2021.
(23) https://www.huffingtonpost.es/entry/aznar-11s-afganistanes613af4f9e4b0dda4cbcce9ee.html.
(24) Los Acuerdos de Minsk firmados en 2014 y 2015 por representantes de Ucrania, Rusia, las Repúblicas Populares de Donetsk (RPD) y Lugansk (RPL) buscaban poner fin a la guerra del Dombas.
(25) El Washington Post informó el 2 de marzo de 2022 que mercenarios chechenos enviados desde Rusia por Ramzan Kadírov, un fiel aliado de Putin, intentaron asesinar al presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy pero el plan fue frustrado y los comandos fueron neutralizados. Fuerzas rusas y chechenas participaron en la matanza de más de 400 civiles que fueron enterrados en fosas comunes en la ciudad de Bucha, ubicada a 40 kms al Noroeste de Kiev.
(26) En los primeros 60 días de guerra las fuerzas rusas perdieron 10 oficiales generales, lo que representaba el 50% de los generales y almirantes en los frentes de guerra. El 14 de abril sería hundido en buque insignia de la flota rusa del Mar Negro, el crucero misilístico Moskvá con la perdida de gran parte de su tripulación, incluyendo el oficial al mando del buque, el Capital de Navío Anton Kuprin.
(27) Una proporción significativa de los activos congelados se encuentra en Europa, principalmente, en Francia, Alemania y el Reino Unido. Sólo el 8.5 % de los fondos se encuentran en Estados Unidos.
(28) https://www.businessinsider.com/airbases-host-ukraine-f-16-russia-legitimate-targets-putin-2024-3.
(29) https://www.elconfidencial.com/mundo/2024-03-24/invasion-ucrania-guerra-rusiamuertes_3852881/.
(30)https://www.dw.com/es/ciudadanos-rusos-cruzan-en-balsa-el-estrecho-de-bering-y-piden-asilo-a-estados-unidos/a-63364879 (31)https://www.euronews.com/2022/09/22/accidental-defenestration-and-murder-suicides-too-common-among-russian-oligarchs-and-putin.